🏇 Un Día en las Carreras
Póntelo en serio: llegó la hora de gritarle a un caballo de madera.
En Un Día en las Carreras no solo apuestas por el caballo… apuestas por la emoción. Este juego convierte tu mesa en un hipódromo desatado, donde se mezclan gritos, traiciones y suerte chancha. Cada ronda es una carrera, y cada carrera, una historia digna de canal deportivo con narrador emocionado.
¿El favorito va ganando?
¿Aparece el tapado de la noche?
¿Te fuiste all-in por ese caballito rojo solo porque te tincó?
Hermoso. Así se juega.
🧠 Resumen del turno:
Elige tu color, junta tus fichas de apuesta y prepara tu mejor grito de emoción contenida.
Observa cómo se desarrolla la carrera con los 2 dados de 6 que seran lanzados continuamente y se iran pronunciando los numeros ganadores y el caballo correspondiente avanzara.
Podran apostar en el tablero por las posiciones de Ganador, segundo y tercer lugar, tambien podremos hacer apuestas paralelas, el rojo le ganara a todos los azules o el 8 amarillo al 11/12.
Cuando un caballo llegue a la meta se pagaran los premios de las apuestas a cada jugador.
Tambien aquellos que fallaron sus apuestas deberan pagar a la casa.
Jugaremos hasta completar 3 carreras, quien logre mas dinero ganá.
🧩 Contiene:
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Tableros de apuestas y de carrera
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9 caballos de madera (¡todos con personalidad propia!)
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Dados, fichas, cartas VIP y sorpresas insólitas
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Dinero en fichas (tranqui, no es real… pero igual duele perderlo)
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Reglas simples y rápidas de explicar
📌 Ficha técnica:
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Jugadores: 2 a 9
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⏳ Duración: 45 a 90 minutos
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🎂 Edad: 10+
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🧠 Dificultad: Baja (accesible, pero con espacio pa’ estrategias picaronas)
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🗣 Idioma: Español
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🐎 Editorial: Devir
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🧠 Diseño: John D. Clair
🦉 Recomendado por El Búho para:
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Familias competitivas con buen humor.
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Grupos de amigos que se toman en serio la tontera.
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Fanáticos del azar, las apuestas y la emoción gritona.
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Partidas donde hay papitas, bebida y ganas de pasarlo chancho.
“Lo jugamos gritando, apostando a ciegas y perdiendo con estilo. Y sí, el caballo verde otra vez lo logró. Inexplicable, pero épico.” – El Búho